capitulo 3

El ultimo capitiulo de hoy!!! mañana mas !

Capitulo 3

- Muy apropiado- repuso ella-, porque, aunque no tengo ninguna estadística oficial, creo que debe ser una de las pocas, si no la única, que ha sufrido tanto. Si Lali estará bien hasta que escoja un nuevo nombre para sí misma.

  El permaneció en silencio.

- Nuestra “salvadora” necesitará más consuelo que la mayoría, gracias al estilo peculiar con el que usted ejerce su vocación.

  Se oyó el sonido agudo de unos pasos que marcaron un ritmo armonice contra el duro suelo. Cuando habló de nuevo, la voz de la mujer parecía venir del lado opuesto de la habitación.

- Usted habría reaccionado de manera bastante poco apropiada los primeros días de esta ocupación- comentó.

- Y quizá usted este reaccionando de manera poco adecuada para la paz.

  La mujer se echó a reír, pero su risa era falsa, pero no se correspondía con una diversión real. Parecía que mi mente se había adaptado bien a interpretar los significados auténticos de los tonos e inflexiones de voz.

- No tiene una percepción clara de lo que supone mi vocación. Paso muchas horas con perros y lobos para descubrir sus distintos tipos de reacciones; no es precisamente el trabajo conflictivo que usted cree.

- Hace exactamente 3 días iba cargada de armas para conseguir el este cuerpo, que al final se termino rindiendo para que lo ocupasen.

- Pues le aseguro que eso es una excepción, no la regla. Los licántropos mutados que se escaparon, nos habrían matado sin pensárselo si hubieran tenido la habilidad suficiente y desarrollada para hacerlo.

  El último momento vivido antes de la inserción, apareció como un recuerdo lejano  que golpea con furia. Y con el último recuerdo paso toda mi vida por delante de mis ojos.

  La ira me inundó, ardiente y salvaje. Jadee por la sorpresa ante una reacción tan inesperada. Me habían hablado de la inestabilidad emocional de los cuerpos de los licántropos mutados, pero esto estaba más allá de mi capacidad de previsión.

  Sentí el latido de la sangre en mi cuello, golpeando detrás de mis orejas. MIS manos se cerraron hasta formar dos puños.

  La maquina que había a mi lado informó de la aceración de mi pulsación  cardiaca. Hubo una reacción en la habitación: los golpes secos de los zapatos de la buscadora se aproximaron, y junto a ellos un ruido más sordo el de unos pies que se arrastraban, seguramente los del sanador.

- Bienvenida a tu nueva vida Lali.- dijo la voz femenina.